Casualidad
Previo a la teoría de la relatividad, el concepto de causalidad estaba determinado: para una causa existe un efecto. Se creía que para todo acontecimiento se debía obtener un resultado que podía predecirse, la revolución en este concepto es que se "crea" un cono de luz de posibilidades (como en la imagen).
Un acontecimiento en el cono de luz del pasado no necesariamente nos conduce a un solo efecto en el cono de luz futuro, desligando la causa y efecto. El observador que se sitúa en el vértice del cono ya no puede indicar qué causa del cono del pasado provocará el efecto en el cono del futuro.